ELIMINACIÓN GRADUAL DE LOS COMBUSTIBLES FÓSILES Y LA PROTECCIÓN DE LOS BOSQUES
15 noviembre, 2025Foto: https://www.larazon.cl/2018/06/04/contaminacion-de-la-amazonia-quien-esta-detras-de-la-destruccion-de-la-selva-mas-grande-del-mundo/ Necesitamos un resultado que conduzca al cambio, y no solo otra hoja de ruta que no lleva a ninguna parte.
Fuente: Greenpeace Internacional
Belém, Brasil, 15 de noviembre. – Al término de la primera semana de la COP30 en Belém, Greenpeace ha pedido a los negociadores que aceleren y cumplan las promesas en materia climática y bosques, asegurándose de que acuerden un plan de acción para poner fin a la deforestación y cerrar la brecha de 1.5 °C.
Jasper Inventor, subdirector de programas de Greenpeace Internacional, declaró: en esta COP seguimos esperando que se apruebe un plan de respuesta global para cerrar la brecha de ambición de 1.5 °C, y eso requiere una hoja de ruta o un plan, para eliminar gradualmente los combustibles fósiles, un plan de acción para poner fin a la deforestación y la tan necesaria financiación climática.
Hemos visto avances en la primera semana, pero necesitamos un resultado que conduzca al cambio, y no solo otra hoja de ruta que no lleva a ninguna parte.
Debemos asegurarnos de que la COP30 ofrezca un plan claro para eliminar gradualmente los combustibles fósiles y acelerar las energías renovables. Pero también debe hacer que las industrias contaminantes paguen por los daños climáticos y por una transición justa, con plazos claros y una reducción inmediata del uso de combustibles fósiles para mantener vivo el límite de 1.5 °C. La COP30 debe ofrecer un resultado que acelere la acción real.
El informe anual actualizado de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC), el Informe de síntesis de las Contribuciones Determinadas a nivel Nacional 2025 (NDC por sus siglas en inglés), puso de manifiesto la evidente falta de ambición, ya que solo prevé una reducción del 12 % de las emisiones para 2035.
Esto está muy lejos de la reducción global del 60 % necesaria (en comparación con los niveles de 2019).
Greenpeace realizó una proyección en la sede de la ONU con imágenes de los impactos climáticos, instando a los delegados de los países a actuar de inmediato.
El informe Land Gap Report 2025 también puso de manifiesto una creciente «brecha forestal», lo que subraya la urgente necesidad de un plan de acción para implementar el objetivo de la CMNUCC para 2030, de poner fin a la deforestación.
An Lambrechts, experta en política de biodiversidad de Greenpeace Internacional, afirmó: está claro que no estamos protegiendo nuestros bosques, pero dado que son una pieza fundamental de la solución para alcanzar el objetivo de 1.5 °C, la COP30 debe dar lugar a un plan de acción para poner fin a la deforestación para 2030.
Aunque hemos visto algunos pasos cautelosos durante la primera semana, después de que los líderes mundiales viajaran a la primera COP celebrada en la Amazonía, los gobiernos deben ahora garantizar que esta COP crucial dé resultados para las personas y los bosques, asegurando que la destrucción forestal llegue finalmente a su fin.
En la COP30, Greenpeace también pide que se incluya un nuevo punto permanente en el orden del día de la CMNUCC, para impulsar el cumplimiento del Nuevo Objetivo Colectivo Cuantificado (NCQG), en particular aumentando la financiación pública de los países en desarrollo, y promover la fiscalidad basada en el principio de “quien contamina paga” para desbloquear una mayor financiación pública para los países en desarrollo.
Anna Carcamo, especialista en política climática de Greenpeace Brasil, afirmó: esta COP ha sido denominada la COP de la implementación y la COP de la verdad. Para estar a la altura de esos nombres, debe proporcionar una financiación climática que sea real, accesible y justa. Los países desarrollados deben proporcionar financiación pública para el clima a los países en desarrollo, para poner en práctica la acción climática, desde las contribuciones determinadas a nivel nacional y las medidas de adaptación, hasta la respuesta a las pérdidas y daños.
Para millones de personas, no es una cuestión de oportunidad, es una cuestión de supervivencia. La financiación climática es, ante todo, una cuestión de justicia climática.
Alcanzar objetivos de financiamiento ambiciosos y equitativos para los países del Sur Global, es fundamental para garantizar una adaptación climática efectiva, una transición justa y una transformación verdaderamente inclusiva. La discusión sobre la distribución justa y transparente de los recursos financieros, no puede quedar fuera, especialmente porque es indispensable avanzar hacia el saneamiento de la deuda climática histórica. En la COP30 se deben llegar a acuerdos que desemboquen en acciones concretas, previsibles y de largo plazo que permitan cerrar brechas, fortalecer capacidades y asegurar que ningún país ni comunidad se quede atrás, agregó Viridiana Lázaro, Campañista de Greenpeace México.

