EN MARCHA, RED INTERDISCIPLINARIA EN NEURODESARROLLO
30 noviembre, 2025Foto: UNAM. Promueve los derechos, la inclusión y el bienestar de quienes presentan discapacidad y diversidad funcional.
Fuente: UNAM
Para fortalecer la investigación disciplinaria, consolidar la formación de profesionales altamente especializados, y vincular el conocimiento psicológico con los desafíos sociales que enfrentamos en México, en la Facultad de Psicología (FP) de la UNAM iniciaron los trabajos de la Red Interdisciplinaria en Neurodesarrollo (RINDe), informó la directora de la entidad universitaria, Magda Campillo Labrandero.
Se trata de un esfuerzo académico colaborativo, que fomenta el estudio y la docencia para adentrarse en el conocimiento y la atención a personas con Síndrome de Down, espectro autista, déficit de atención e hiperactividad, discapacidad intelectual y dificultades de comunicación y aprendizaje.
De acuerdo con datos de 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, de los 38.2 millones de niñas, niños y adolescentes en nuestro país (30 por ciento de la población nacional), 7.8 por ciento presentaban algún tipo de discapacidad.
Al presidir la inauguración de la Red en el auditorio Luis Lara Tapia de la FP, explicó que tiene tres ejes: impulsar y consolidar la investigación; fortalecer la vinculación social de la psicología; y proyectar a la Facultad como referente nacional e internacional en el estudio del neurodesarrollo.
Esta iniciativa promueve los derechos, la inclusión y el bienestar de quienes presentan discapacidad y diversidad funcional.
La apuesta por la cognición computacional, la inteligencia artificial, la realidad virtual y otros enfoques de vanguardia nos permitirá ampliar nuevas capacidades de evaluación, intervención y comprensión del neurodesarrollo humano. Esto reafirma nuestro compromiso con una ciencia rigurosa, ética y profundamente sensible al bienestar de las personas.
La consolidación de la Red es un paso decisivo para fortalecer el potencial académico, científico y social, el cual coloca al neurodesarrollo en el centro de las prioridades institucionales con una visión de responsabilidad, innovación y compromiso universitario.
La colaboración en la RINDe amplía nuestras posibilidades de incidencia social, y permite que el trabajo académico dialogue con las políticas públicas y estrategias de atención de relevancia.
De la investigación básica a la clínica
Los trastornos del neurodesarrollo afectan los dominios emocional, conductual, social-familiar, motor, de aprendizaje, de comunicación y la salud física, explicó Octavio César García.
La RINDe cuenta con proyectos colaborativos que avanzan a la transdisciplinariedad.
“Se proyecta como una unidad de investigación y docencia que, además de generar conocimiento, ofrezca servicios de rehabilitación neuropsicológica e intervenciones psicoeducativas.
Como parte de sus objetivos se busca articular la investigación básica, clínica y aplicada con la docencia para formar profesionales.
En lo científico, la producción de conocimiento interdisciplinario de calidad e impacto; y a nivel social-clínico la inclusión de personas con trastornos de neurodesarrollo mediante servicios de evaluación, intervención y acompañamiento, vinculados con la práctica profesional y el aprendizaje-servicio.
