ALOPECIA

ALOPECIA

9 mayo, 2018 0 Por Rene Davila
Productos no registrados por la Cofepris, no garantizan efectividad.

El especialista podrá retrasar la caída del cabello.

Afecta a hombres y mujeres; se clasifica en cicatriciales y no cicatriciales.

Fuente: SS

Los trastornos hormonales, medicamentos, enfermedades, dietas estrictas, el parto y la lactancia, pueden ser la causa anormal de la pérdida de cabello, advirtió la Jefa de Servicio de Dermatología del Hospital General de México Eduardo Liceaga, Ivonne Arellano.

La alopecia -también conocida como calvicie- afecta a hombres y mujeres, y se clasifica: en cicatriciales y no cicatriciales. Dentro de las alopecias no cicatriciales, la más común es la de efluvio telógeno, que se caracteriza cuando el cabello se cae de golpe debido a la insuficiente energía que tiene el cuero cabelludo para retenerlo.

Regularmente, este tipo de calvicie se presenta después de un parto, de alguna enfermedad, o de haber tomado algún fármaco o recibido algún tipo de quimioterapias. Sin embargo, aseguró que en este caso, el cabello se puede regenerar entre dos y tres meses.

Entre las causas de las alopecias cicatriciales, se encuentran la foliculitis (inflamación de los folículos pilosos), y algunas enfermedades como el lupus discoide (lesiones circulares en la piel). En este tipo de alopecia, el cabello que se cae ya no se repone, debido a que en la zona afectada se genera una cicatriz permanente.

Por eso, es importante acudir con un dermatólogo desde que se comienza a notar la caída anormal del cabello, porque al diagnosticar el problema, el especialista podrá retrasar la caída del cabello.

Algunos tratamientos para las alopecias son: shampoos, lociones capilares y suplementos alimenticios. Sin embargo, en etapas avanzadas será necesario un injerto de pelo, e incluso un proceso quirúrgico.

Con respecto a los productos que se venden, pero que no están registrados por la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris), recomendó no adquirirlos, debido a que no garantizan su contenido, ni su efectividad.