ALTA EXPOSICIÓN A PLOMO, MAYOR PRESENCIA DE INFECCIONES

ALTA EXPOSICIÓN A PLOMO, MAYOR PRESENCIA DE INFECCIONES

23 diciembre, 2020 0 Por Rene Davila

Foto: Internet. Estudio realizado a empresa recicladora de baterías.

Fuente: Cinvestav

Un documento de la Organización Mundial de la Salud, en torno al reciclaje de acumuladores de autos, señala que para su fabricación se emplea alrededor del 85% de la demanda mundial de metal de plomo refinado, pero la mayor parte es obtenida por la recuperación de las baterías en desuso, por lo que las personas que se dedican a esa recolección, están altamente expuestas a daños en sus sistemas y aparatos neurológico, hematológico, gastrointestinal, cardiovascular, reproductor y renal.

En México, el reciclaje de baterías automotrices plomo-ácido, es una práctica común para empresas establecidas bajo normas y reglamentación nacionales; al tratarse de un material tóxico y altamente acumulativo, obligan a que las empresas realicen constantemente pruebas médicas en los trabajadores.

Nadia Cristina López Vanegas, estudiante de doctorado del Departamento de Bioquímica del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav), analizó entre 30 y 35 trabajadores, de una planta de reciclaje de baterías automotrices, para determinar cómo la exposición a plomo esta relacionada con el deterioro de las células del sistema inmune.

“Se observó infecciones del tipo respiratorias, genitourinarias, gastrointestinales y dermatológicas, con mayor frecuencia, lo que indica que el sistema inmune está afectado por altas concentraciones de plomo en la sangre”.

Estudió marcadores de oxidación, en administrativos hasta personal que laborara en procesos de fundición, oxidación y almacenaje. El dato relevante, es que además de los signos y síntomas clínicos evaluados como cólicos abdominales, cefaleas, dolor muscular, parestesias, mareos y alteraciones en la coordinación motora, que provoca la exposición al plomo por afectación al sistema nervioso, también presentan daño oxidativo a nivel molecular.

“Con pruebas bioquímicas de daño oxidativo como la lipoperoxidación (degradación oxidativa de lípidos) en los eritrocitos -que son las células de la sangre (también conocidos como glóbulos rojos)-, encontró que tienen altas concentraciones de un metabolito producto de esta lipoperoxidación generada por el plomo”.

A raíz de ese daño oxidativo en los eritrocitos, las células presentan mayor porcentaje de apoptosis de los eritrocitos (nombrada también eriptosis o muerte celular programada de los eritrocitos), mayor porcentaje de apoptosis de leucocitos, -células del sistema inmune y de igual manera se encuentran en la sangre-.

Los leucocitos son los responsables de producir citocinas y en estos trabajadores se encontraron bajas concentraciones de una de ellas, el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α, de sus siglas en inglés), lo que se traduce en detrimento en las defensas del organismo, dando paso a una vulnerabilidad hacia diversos tipos de infecciones.