“JUGO DE NUBE” PARA COSECHA DE AGUA DE LLUVIA

“JUGO DE NUBE” PARA COSECHA DE AGUA DE LLUVIA

21 marzo, 2021 0 Por Rene Davila

Foto: UNAM. Se capta agua de lluvia para purificarla y hacerla potable.

Fuente: UNAM

El estrés hídrico se perfila como un desafío en el horizonte inmediato en diversas regiones del planeta. Para dar respuesta a esta problemática, un grupo de universitarios de la Dirección General de Atención a la Comunidad (DGACO), impulsa un programa de cosecha de agua de lluvia denominado “Jugo de nube”, que podría contribuir a mitigar el estrés hídrico.

De acuerdo con Luis Gutiérrez Padilla, subdirector de Proyectos para Comunidades Seguras y Sustentables de la DGACO, tan solo en la Ciudad de México aproximadamente 300 mil personas no tienen acceso al recurso hídrico para consumo humano seguro o la reciben de baja calidad. Aunque la cosecha de agua es una técnica utilizada en diversos países desde hace tiempo, lo novedoso del proyecto universitario, consiste en que capta agua recolectada en una atmósfera contaminada como la de la CDMX.

Los investigadores instalaron el sistema de captación de agua de lluvia en el techo del edificio de Programas Universitarios, atrás de la biblioteca de la Facultad de Ciencias. “Es una superficie de 193 m2 de vidrio, adecuada, porque este material no tiene las porosidades que almacenan elementos. Ahí se capta el agua y se conduce mediante tuberías de polipropileno a un tanque”. El sistema, llamado “Tlaloque”, fue creado y probado por una pequeña empresa, Isla Urbana, integrada por un grupo de emprendedores universitarios, quienes obtuvieron un premio por su eficiencia.

Se trata de un conjunto de recipientes que van filtrando el agua de los compuestos de la atmósfera, que arrastra la lluvia. Después de una tormenta puede captar hasta 400 litros de agua. Una vez lleno el “Tlaloque” sin los compuestos y polvo de la atmósfera, el agua se envía a dos tanques de 30 mil litros cada uno. Cuando el agua entra a los tanques, de manera pausada se depositan más sedimentos. Después, con una pichancha colocada en la superficie, se extrae el agua sin agitar los tanques. Más tarde se le agrega una pastilla de cloro en una concentración estandarizada para mantener los parámetros de calidad.

“En ese proceso de drenado, se va cerrando cada vez más la posibilidad de que pasen impurezas y compuestos. El flujo se dirige a un filtro de 90 micras, luego a otro de carbón activado. Un tercero filtra partículas de 10 micras y finalmente, se le agrega ozono para eliminar todo tipo de organismos vivos”. Por último, el agua del dren de filtrado pasa a los dispensadores que dan servicio a la comunidad del área de la Facultad de Ciencias. Cada dispensador, a su vez, tiene dos filtros más (uno para cinco y otro para tres micras) y cuentan con desinfectante.

Después de someterse al proceso, el agua recupera el sabor que tenía antes de las cloraciones, y puede beberse de forma segura, por eso la comunidad la busca. En los dispensadores rellenan sus botellas cuantas veces lo desean”.

¡Pásele por su jugo!

Cuando empezó a operar, el proyecto “Jugo de nube”, abastecía a poco más de 150 usuarios al día, con la cosecha de agua de aproximadamente cinco meses. “Ahora que se agregó un tanque más y con esa misma demanda, logramos extender el periodo toda la temporada de estiaje. 

La experiencia que comenzó como un plan académico, podría escalarse a otras dimensiones; de hecho, la DGACO cuenta con proyectos ejecutivos para los cinco planteles del CCH. “La intención es instalarlos a escalas mayores”. El proyecto “Jugo de nube” fue documentado en el artículo “Rainwater Harvesting as a Drinking Water Option for Mexico City”, publicado en la revista Sustainability en 2018. “Hasta entonces no teníamos noticia de una experiencia semejante hasta ese nivel; es decir, haber obtenido parámetros para comparar la calidad del agua pluvial con criterios nacionales e internacionales”.

“Sin duda en muchas localidades se consume el agua pluvial, pero el aspecto novedoso de ‘Jugo de nube’ se fundamenta en que siguió un proceso minucioso, detallado para ofrecer total seguridad a nuestra comunidad de que el agua que ofrecemos es totalmente segura”.