LA MAMOGRAFÍA ÚNICO ESTUDIO QUE REDUCE LA MORTALIDAD POR CÁNCER DE MAMA
2 julio, 2018Hasta ahora, es la única técnica validada para la detección temprana de esta enfermedad.
Fuente: AMC
El cáncer de mama se origina en la glándula mamaria de los humanos, siendo en las mujeres más frecuente. En México, 5 mil 500 de ellas mueren cada año, 15 cada 24 horas por lo que representa la primera causa de muerte por cáncer entre las mujeres. El cáncer es una enfermedad que se caracteriza por la división no controlada de las células con la capacidad de diseminarse a otros tejidos. La detección temprana (antes de la presencia de síntomas) es muy importante, podría reducir la mortalidad y las pacientes podrían contar con una mejor probabilidad de curación. Por estas razones “la mamografía es la única técnica que ha demostrado ser capaz de detección temprana”, sostuvo María Ester Brandan, investigadora del Instituto de Física de la UNAM.
La especialista en física médica e integrante del Consejo Directivo de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) aclaró que la detección no es igual al diagnóstico y que éste se consigue únicamente a través de una biopsia, la cual se realiza luego detectarse señales “de sospecha”, entre ellas las microcalcificaciones (con ciertas características de forma y distribución espacial), masas (con ciertas características de forma), o cambio en la arquitectura del tejido fibroglandular, y estas señales se observan en la imagen radiológica de la glándula (mamografía).
Algunas de las técnicas publicitadas recientemente en México no han demostrado la capacidad de detectar el cáncer de manera temprana. Es el caso de la basada en la termografía, un procedimiento que utiliza sensores para detectar patrones de calor y flujo sanguíneo en la superficie del cuerpo y regiones cercanas bajo la piel, que es lo que proponen dos grupos independientes de investigadores (y empresarios) asociados con el diseño y elaboración de brasieres (sostenes), capaces de construir un mapa térmico de la glándula mamaria, como herramienta de detección temprana de cáncer. También se ha promovido un aparato comercial que mide la electroimpedancia del tejido mamario, con el mismo objetivo, y también sin la esperada validación previa de la técnica.
¿Cómo se detecta (y cómo no se detecta) el cáncer de mama? Técnicas validadas y técnicas en etapa de investigación
No es posible evitar el cáncer de mama. Para cáncer de mama, el tamizaje se enfoca en mujeres —sólo el 1% del cáncer de mama afecta a varones— con edades entre 40 y 75 años, en términos generales. Los programas de tamizaje hacen uso de la mamografía, y todos se basan en la aplicación de mamografías regulares (anuales, cada dos o tres años) de acuerdo con el grupo poblacional. La normativa mexicana (NOM 041‐SSA2‐2011) contempla la realización de una mamografía cada 2 años en mujeres entre 40 y 69 años.
Detectar o no detectar
La mamografía es un estudio radiológico de la glándula mamaria, su sensibilidad o su capacidad promedio de ver un cáncer es de 80%. Como desventaja podría señalarse que esta técnica no es de utilidad para mujeres jóvenes y su sensibilidad es menor que el promedio para mamas compuestas de tejido fibroglandular denso. Hay dos técnicas complementarias a la mamografía: una es el ultrasonido mamario y la resonancia magnética mamaria.
El primero usa ondas sonoras para crear una imagen computarizada de la parte interna del seno, es útil para observar algunos cambios en los senos, como masas —especialmente aquellas que se pueden palpar, pero que no se pueden ver en un mamograma— más que calcios o cambios en mujeres con tejido mamario denso. También puede utilizarse para analizar un cambio que se observó en un mamograma. Es útil porque a menudo puede indicar la diferencia entre quistes llenos de líquido y masas sólidas, además, está ampliamente disponible, es relativamente fácil de hacer, y no expone a la persona a radiación. La resonancia magnética mamaria es una tecnología que usa campos magnéticos para producir imágenes detalladas del interior del cuerpo, no usa rayos X, por lo que no conlleva exposición a radiación ionizante. Se usa para las mujeres en general con el riesgo promedio sin condiciones especiales que las haga un grupo de riesgo, su sensibilidad y especificidad son menores que la de una mamografía.
Técnicas en etapa experimental
Existen otras técnicas con rayos X, imágenes moleculares, termografía, impedancia electromagnética, entre otras, que se encuentran aún en etapas de desarrollo y que a la fecha no pueden reemplazar a la mamografía como prueba de tamizaje. Las técnicas presentadas como emergentes podrían llegar a ser útiles en el futuro, aunque lo cierto es que todas estas requieren más investigación, y su evaluación definitiva en ensayos clínicos, detalló la especialista.