8 DE CADA 10 ADOLESCENTES MEXICANOS REVISAN SU CELULAR ANTES DE LEVANTARSE DE LA CAMA
30 noviembre, 2018Tener tecnología en el cuarto significa pasar más tiempo con las pantallas.
El smartphone se ha convertido en la pantalla más importante en la vida diaria de los adolescentes en todo el mundo. Una encuesta online realizada por Motorola en marzo de este año (“Quiz Phone Life Balance”) como parte de su campaña para generar conciencia sobre el uso del smartphone, y en la que participaron más de nueve mil adolescentes mexicanos, lo confirma. La encuesta señala que el 79% de los chicos entre 10 a 19 años revisan su celular por la mañana, aun antes de levantarse de la cama. El celular es la primera pantalla que entra en contacto con los chicos cuando comienzan su día.
Este no es un fenómeno exclusivamente mexicano. En EU, 8 de cada 10 adolescentes se conectan a un dispositivo menos de cinco minutos después de despertarse, mandan un promedio de 100 textos por día, un 80% duerme con sus celulares y un 45% no se desconecta nunca. Las cifras pueden impactar, pero no sorprenden. Mirar el teléfono celular es lo primero que hacen los adolescentes al despertarse y, posiblemente lo último que realizan antes de acostarse. Las habitaciones de los chicos se han convertido en verdaderos universos tecnológicos, la mayoría duerme en una habitación poblada de pantallas. En todo el mundo, dicen los estudios internacionales, las habitaciones de los adolescentes cuentan con televisión, celular, computadora y/o videojuegos…En este contexto parece natural que lo primero que hagan antes de despertar bien, es revisar el smartphone.
La presencia de tecnología en el cuarto, generó una relación más íntima entre los adolescentes y las pantallas -explica Roxana Morduchowicz, doctora en comunicación, consultora de Unesco y autora del libro Ruidos en la web. “Los usos hoy son más individuales y están muy lejos de la tradicional imagen de la familia del siglo XX reunida en el comedor frente al único televisor de la casa para compartir el mismo programa. En el siglo XXI las pantallas se multiplicaron, están en cada habitación y promueven una práctica más personal y más prolongada: tener tecnología en el cuarto significa pasar más tiempo con las pantallas”.
Por este motivo, especialistas en todo el mundo sugieren que cuando los chicos están en edad de cursar la primaria, se evite equipar la habitación con tecnología. “Es mejor que las pantallas se ubiquen en espacios compartidos de la casa, un comedor, un escritorio o la cocina. Las investigaciones reflejan que, de esta manera, se reducen las horas que los chicos pasan con las tecnologías y, sobre todo, se evita que las usen en soledad, ya que sus cuartos suelen ser territorios a los que muchos adultos no entran”, afirma Morduchowicz. “Si los padres quieren evitar que los adolescentes miren el celular antes de levantarse de la cama (porque duermen con el móvil en su cuarto), hay una alternativa que es de fácil implementación: por la noche dejar cargando los celulares en el comedor. Así se evita que los chicos estén conectados a la pantalla las 24 horas”.