EL FUTURO DE LOS NEGOCIOS ESTÁ EN LAS PROVINCIAS

EL FUTURO DE LOS NEGOCIOS ESTÁ EN LAS PROVINCIAS

2 noviembre, 2020 0 Por Rene Davila

Foto: Internet. Proyecto “Villas de trabajo”.

Las capitales de todo el mundo se enfrentan a fuertes desafíos para satisfacer las necesidades de sus crecientes poblaciones, cada vez más abarrotadas por la frecuente migración de sus provincias. Servicios básicos como la educación, vivienda, atención a la salud y otras infraestructuras, resultan insuficientes ante este panorama. Según un  informe de la ONU, actualmente las áreas más urbanizadas son América del Norte con el 82 %, América Latina y el Caribe con 81 %, Europa con 74 %, Oceanía con 68 %, Asia con 50% y África con 13 %.

Por otro lado, la pandemia aceleró la adopción de una visión más favorable respecto al trabajo a distancia, y abrió la posibilidad de adoptar nuevas herramientas de teletrabajo. El uso de tecnologías en la nube ha permitido que los empleados accedan a los recursos que requieren y cuenten con toda la información de sus organizaciones las 24 horas del día, sin importar el lugar en el que estén laborando.

El teletrabajo no resuelve en sí el problema de la urbanización, ya que muchos de estos trabajadores remotos todavía viven en las ciudades principales de su país, dijo Sridhar Vembu, CEO de Zoho. Sin embargo, es un primer avance en la comunicación a distancia y la tecnología de colaboración. Gracias a esta tendencia, las personas que viven en provincia y zonas rurales podrían llevar su trabajo de manera normal y eficiente sin necesidad de mudarse de su localidad, esta tendencia de urbanismo podría restaurar la vida provincial en los próximos años.

Actualmente, se encuentran desarrollando el proyecto “Villas de trabajo”, en el estado de Tamil Nadu, en India. En esta propuesta laboral, la organización tiene 200 ingenieros distribuidos en 10 aldeas de la región (20 en cada aldea), que además de trabajar de forma colaborativa con sus pares y crear productos de software para el mundo, ayudan a esas comunidades. Además, durante los últimos dos años, estableció un centro de atención al cliente en la pequeña ciudad de Renigunta, en Andhra Pradesh, donde laboran 120 personas de la comunidad local y de pueblos cercanos.

La compañía identificó que 40% de sus empleados en India provienen de zonas municipales y provinciales. Esto ocasionaba que los trabajadores dejarán sus familias por tiempos prolongados, gastaran en rentas y en manutención adicional.

El mayor error ha sido abandonar las tradiciones y la familia para asumir retos de supervivencia en las grandes urbes. Ahora, al vivir cerca de sus propias localidades, pueden mantener una vida en compañía de su familia, apoyar al comercio local, ahorrar dinero y continuar con su trabajo habitual.

Un modelo a seguir para América Latina

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) publicó el pasado mes de septiembre un estudio donde señaló que la población con acceso a internet en América Latina está 60% por encima de regiones como Asia-Pacífico, África y Oriente Medio. En los próximos años el teletrabajo contribuirá a la transformación digital de los países latinoamericanos, lo que evitará en cierta medida la migración de las provincias, traerá el desarrollo económico local, e impulsará sectores agrícolas que se han visto afectados por la migración en los últimos años en los países de la región.

Además, permitirá que las localidades obtengan oportunidades laborales y acceso a herramientas digitales lo que ayudará al crecimiento y aprendizaje de la población más rezagada.

En caso de tener éxito el proyecto Villas de trabajo, se adoptará el modelo en México (Querétaro) y Estados Unidos (Austin, Texas). Todos dicen que el talento de las provincias no es de clase mundial. Pero no se dan cuenta de la aportación que puede hacer la gente que proviene de pueblos y provincias más pequeñas de cada región.

Otros sectores, como los turísticos, tecnológicos y financieros, pueden representar retos al ser trasladados a zonas provinciales, debido a las necesidades propias de su mercado, de su infraestructura o de la necesidad de una fuerza laboral específica de una ciudad o región. Sin embargo, muchas áreas operativas de estos negocios pueden adaptarse al cambio flexibilizando sus áreas de informática, servicio al cliente, redes sociales o telemarketing, entre otros ejemplos.