PERROS Y GATOS NO REPRESENTAN RIESGO RELACIONADO CON COVID-19

PERROS Y GATOS NO REPRESENTAN RIESGO RELACIONADO CON COVID-19

29 marzo, 2020 0 Por Rene Davila

El contacto con ellos reduce estrés, baja la presión sanguínea y mejora la vida de personas con enfermedades cardiovasculares.

Fuente: UNAM 

La Organización Mundial de la Salud, la Asociación Americana de Medicina Veterinaria, la Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales y otros organismos internacionales, han determinado que los perros y gatos no representan un riesgo relacionado con la COVID-19.

No se ha demostrado una infección, que el virus ingrese y genere una respuesta en su sistema inmune, que se enfermen o presenten signos asociados con la COVID-19, o que sean un factor de transmisión; tampoco se ha encontrado una relación entre contagios y presencia o convivencia con perros o gatos.

La familia de coronavirus es muy amplia y los perros y gatos tienen padecimientos causados por algunos de ellos, que son como “primos” del SARS-Cov-2, pero ninguno de éstos puede generar alguna enfermedad en seres humanos, afirmó Ylenia Márquez Peña, responsable del área de Urgencias y Terapia Intensiva del Hospital Veterinario de Especialidades de la UNAM.

La también maestra en Medicina Veterinaria, adscrita al Departamento de Medicina, Cirugía y Zootecnia para Pequeñas Especies, aclaró que para evitar que perros y gatos se estresen al permanecer más tiempo en casa durante la contingencia sanitaria por la COVID-19, una opción es idear juegos interactivos relacionados con su actividad mental, como enseñarles trucos o entrenarlos. “Se les pueden dar órdenes como: sentado, echado, quedarse quieto, o en las que pongan en juego su olfato. Hay muchos tutoriales en Internet, pueden hacer uso de ellos y pasar buenos momentos”.

Los gatos también son susceptibles a los cambios de hábitos y rutina, y pueden ser entrenados. “Quizá están acostumbrados a que nos vamos y los dejamos en casa, pero al estar allí todo el día, se sienten invadidos y pueden estresarse”. Una alternativa es generar actividades con las que pasen buenos momentos, y ayudar a disminuir el estrés ocasionado por el encierro.

“El contacto con los animales reduce los niveles de hormonas asociadas al estrés, baja la presión sanguínea, y en general mejora la calidad de vida de quienes sufren enfermedades cardiovasculares. Podemos acariciarlos y cepillarles el pelo, sugirió la académica de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ) de la UNAM. Llamó a estar atentos a los cambios de comportamiento de las mascotas, pues pueden ser signos de estrés; por ejemplo, que quieran morder o arañar, que se escondan en un lugar y no quiera salir a comer, orinar o defecar.

“A los animales de compañía los puede estresar un niño inquieto, que sea brusco con sus movimientos o manipulaciones; inmediatamente vamos a ver que huyen de él para esconderse. Hay que tener cuidado, alejar al pequeño para que no sea lastimado, dejar que se tranquilice el animal y explicarle al pequeño lo que está sucediendo, y que debe modificar su comportamiento. Como adultos debemos supervisar esas interacciones, y si hay dudas sobre su comportamiento, llamar al médico veterinario y pedir asesoría”, subrayó la especialista en medicina y cirugía de perros y gatos.