REHABILITA TUS PAPILAS GUSTATIVAS

REHABILITA TUS PAPILAS GUSTATIVAS

29 noviembre, 2023 0 Por Rene Davila

Y dile adiós a los ultraprocesados.

La mayoría de las personas somos “saboteados” por las papilas gustativas de nuestra lengua, al momento de elegir nuestros alimentos. Los fabricantes de alimentos son expertos en hacer productos altamente sabrosos. Invierten mucho tiempo y dinero creando alimentos multisensoriales, dando como resultado final un producto ultraprocesado, que puede manipular las papilas gustativas y activar los centros de recompensa en nuestro cerebro.

Por ejemplo, los deditos de queso, además de ricos, parecen derretirse en la boca. Es un snack delicioso. Pero parece ser que el sabor de lo natural no es probablemente tan generoso. Los alimentos integrales, que están llenos de los nutrimentos requeridos por el cuerpo, pueden tener una dulzura, salinidad o riqueza natural. Pero ¿qué posibilidades tiene el brócoli en comparación con los deditos de queso?

«Los alimentos procesados casi siempre contienen azúcar agregada, sal y grasas saturadas en las cantidades correctas, y estos son aditivos que nuestro paladar podría esperar con ansias».

Por ello, se nos podría hacer tan difícil apreciar los alimentos enteros y ricos en nutrimentos, que deberíamos estar comiendo mayoritariamente. Y justo por esto, las papilas gustativas podrían necesitar, al igual que una computadora, reiniciarse y volverlas a educar.

¿Por qué volver a entrenar tus papilas gustativas?

Cuando se consumen en exceso, azúcar agregado, sal y grasas saturadas contenidos en los alimentos procesados, tu salud se puede ver muy dañada.Los azúcares agregados son calorías vacías que conducen al aumento de peso e incrementan el riesgo de enfermedades crónico-degenerativas, como la diabetes tipo 2.

La sal es un electrolito importante, pero comer demasiada, (lo que muchos de nosotros hacemos), puede causar también consecuencias graves a la salud a largo plazo, como presión arterial alta, enfermedad cardíaca y daño en los riñones.

Las grasas saturadas, son las grasas no saludables que aumentan el colesterol en la sangre, y conducen a enfermedades del corazón.Pero al querer eliminarlos, nos encontramos con que es más fácil decirlo, que hacerlo.Prácticamente todos los alimentos procesados que vemos en el supermercado (postres, bocadillos, refrescos, golosinas, cenas congeladas, pan dulce, cereales y condimentos) contienen estos aditivos.

Pero debido a que nuestras papilas gustativas ya están entrenadas para adorar alimentos ultradulces o salados y, además, muy sabrosos, que cuando no tenemos esos sabores, podríamos comer sin sentir satisfacción.Cuando esperas un brownie mega dulce, probablemente una manzana se quede corta para las expectativas de tus papilas gustativas.

La solución, es una rehabilitación de papilas gustativas, una forma de reiniciar tus papilas gustativas. Así tu paladar podrá reconocer como satisfactoria la dulzura natural, la salinidad y la riqueza de los alimentos integrales y naturales que deberíamos comer.

¿Qué es una rehabilitación de papilas gustativas?

Es prestar atención a los tipos de alimentos que estás consumiendo y ser consciente de cuáles provienen de la naturaleza, y cuáles son ultra o mínimamente procesados, no se trata de eliminar del todo los procesados, pero sí minimizarlos. La idea es pensar en la cantidad de azúcares agregados, sal y grasas saturadas contenidas en los ultraprocesados que se compran con frecuencia.

Debemos reflexionar que no nos brindan ningún beneficio nutricional real. Educar de nuevo nuestras papilas gustativas es como practicar una especie de “mindfulness de la nutrición” y por ello, las palabras clave aquí son: -conciencia plena-. Es decir, ser verdaderamente conscientes de lo que compramos y de lo que estamos metiendo a nuestro cuerpo.

En esta etapa es crucial hacer intercambios más saludables, que darán frutos a medida que tus papilas gustativas se ajusten gradualmente, apreciando eventualmente la dulzura de una zanahoria o un pimiento, la salinidad natural de un trozo de pescado o una yema de huevo y la riqueza de un aguacate o un puñado de nueces.

Nuestras papilas gustativas pueden restablecerse bastante rápido, especialmente cuando se trata de volver a entrenar nuestras expectativas en torno a lo salado». Puede tomar tan poco, como un mes.

Volver a entrenarlas para satisfacerse con menos azúcar agregada y grasas saturadas puede tomar un poco más de tiempo. Hacer el ajuste valdrá la pena. Recordemos, no se trata de eliminar de golpe los ultraprocesados.

  • pasos para restablecer tus papilas gustativas.

1.- Lee las etiquetas nutricionales. Ten en cuenta la cantidad de azúcar agregada, sal y grasas saturadas que consumes cada día. Conocer la cantidad de azúcar agregada, sodio y grasa saturada hay. Cuantos menos ingredientes haya en la etiqueta, significa menos procesados y esto es mucho mejor.

La American Heart Association recomienda limitarse a:

  • 24 gramos de azúcar añadida por día para las mujeres; 36 gramos para hombres
  • 2,300 miligramos de sal por día; menos si tienes presión arterial alta o una afección cardíaca
  • 11 a 13 gramos de grasa saturada por día (para alguien que come una dieta de 2,000 calorías)

2. En serio, lee todas las etiquetas nutricionales. Estos aditivos también podrías encontrarlos en:

  • Panes
  • Condimentos
  • Cereales
  • Cremas de café
  • Barritas energéticas
  • Frutas y bebidas saborizadas
  • Granola
  • Carnes envasadas, como perros calientes, tocino y carnes frías
  • Mayonesas
  • Bebidas deportivas
  • Yogures

La cantidad de azúcar o sal agregada en estos alimentos puede no parecer inmediatamente alarmante, pero estas pequeñas dosis podrían tener un impacto acumulativo. Alrededor del 75% de la sal en nuestras dietas proviene de alimentos procesados, no del salero.

3. Comienza a intercambiar alimentos procesados por integrales. Una vez que sepas cuánta azúcar, sal y grasa obtiene de los alimentos procesados, será hora de comenzar a cambiarlos por otros más saludables. Realmente buscamos que las verduras y frutas enteras sean el pilar de nuestras dietas, y pueden ser frescas o congeladas. En cuanto a las proteínas, buscamos las menos procesadas.

Las opciones sin procesar incluyen pollo fresco, pavo, pescado o carne de res. Esto también se aplica a los frijoles y otras fuentes de proteínas vegetales, por lo que es mejor elegir frijoles enlatados que digan «sin sal agregada», pero nada mejor como cocinarlos desde cero.

Y, si tu dieta es a base de plantas y vegetales, será importante saber que las alternativas de carne prefabricadas tienden a ser altamente procesadas.

4. Reconcíliate con sabores más allá del dulce y salado. Si tu paladar está buscando más sabores, durante este reseteo de papilas, recuerda que hay otras opciones, más allá de agregar azúcar, sal o mantequilla. Queremos que tu comida siga teniendo sabor, pero que provenga de condimentar verduras, hierbas y especias. Por ejemplo, podrías considerar intentar:

  • Ajo
  • Cebolla
  • Jalapeño
  • Tomillo
  • Orégano
  • Romero
  • Cayena
  • Comino
  • Pimiento
  • Chile en polvo

Y aunque los edulcorantes artificiales son comunes para endulzar, pueden alterar tu paladar, aunque técnicamente no sean azúcar. Con los edulcorantes artificiales, sigues bañando tus papilas gustativas de algo que es demasiado dulce. «Esto nos lleva de vuelta a la percepción de que una manzana no cumple las expectativas de un dulce postre».

Para obtener algo de dulzura sin manipular tus papilas gustativas, reducir la cantidad de edulcorante artificial que usas durante el día.

5. Aprecia tu nuevo paladar. Con la rehabilitación de papilas gustativas, eventualmente notarás un cambio en tu paladar, especialmente si comes algo muy dulce o muy salado, explica Angela Snyder, nutrióloga de bienestar del Hospital Houston Methodist.