REVICTIMIZACIÓN Y DESCONOCIMIENTO LEGAL LIMITAN DENUNCIAS POR VIOLENCIA EN EL NOVIAZGO

REVICTIMIZACIÓN Y DESCONOCIMIENTO LEGAL LIMITAN DENUNCIAS POR VIOLENCIA EN EL NOVIAZGO

2 julio, 2022 0 Por Rene Davila

Foto: UNAM. Sólo de 4 a 10% de los jóvenes realizan una acusación.

Fuente: UNAM

La violencia en el noviazgo es un problema social por las implicaciones y el desgaste que ocasiona, pero también de salud pública por el número de casos, así como por las consecuencias que genera en los individuos, afirmó la profesora de la Facultad de Psicología (FP) de la UNAM, Claudia Ivethe Jaen Cortés, durante la conferencia a distancia “Violencia en las relaciones de noviazgo ¿Cómo identificarla y prevenirla?”, organizada por la FP.

Solo de cuatro a 10 por ciento de los jóvenes denuncian conductas violentas por parte de sus parejas, ante autoridades de salud o instancias jurídicas. “Es bajo el porcentaje y ello se debe a la revictimización de los denunciantes y al desconocimiento de los procedimientos legales”. Ante ello, es necesario enseñar –desde niños hasta adultos– lo que se debe llevar a cabo en esta materia ante situaciones de abuso.

Numerosos jóvenes viven esta situación en secreto, por lo que se va deteriorando la persona pues la relación “lo consume”; otros acuden a sus pares para solicitar consejo, pero en su mayoría recurren “al ojo por ojo”. Lo mejor es dirigirse a las instituciones que existen en el país para que les brinden apoyo, hablar con un familiar de confianza o con los padres para tomar medidas y terminar el noviazgo.

Las agresiones inician entre risas, con un jugueteo agresivo; uno de los miembros de la pareja pone apodos en apariencia cariñoso, da nalgadas, pellizquitos y empujones. A medida que surge algún conflicto o situación que no sea agradable, esa actitud avanza hacia conductas agresivas.

También confunden los actos de control y manipulación como manifestaciones de amor, por los que es difícil detectarla, y para ellos además resulta complejo comprender o apreciar que están en una relación donde existe abuso, “quizá para uno de ellos un pellizco o un apodo no signifiquen gran cosa, pero para él otros sí. Unos pueden tomarlos con tintes cariñosos, mientras que para otros signifique una ofensa”.

Resulta complicado medir la violencia en el noviazgo. La mayoría de los estudios señalan que inicia de los 12 a 13 años, aunque en la actualidad los adolescentes comienzan relaciones románticas de los 10 a los 12 años.

Son diversos los tipos de agresión: emocional o psicológica, es decir, cuando se tiene la intención de dañar los sentimientos de la pareja, incluso se comete abuso verbal para ocasionar dolor, malestar emocional, sufrimiento; física, la cual atenta contra el cuerpo de la persona, “aquí pueden darse patadas, pellizcos, empujones, etcétera; sexual, que va desde la presión para tener intercambio sexual, actos sexuales que no se desean, incluso violación”.

Desafortunadamente se carece de estudios recientes en México que analicen la prevalencia del fenómeno. Los datos más recientes son de la Encuesta Nacional sobre Violencia en el Noviazgo (Envin) que realizó el Instituto Nacional de la Juventud en 2007; y de la del Instituto Nacional de la Mujeres que llevó a cabo la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares de 2016 (Endireh). La primera reportó que siete de cada 10 adolescentes y jóvenes de 15 años y más experimentaron un evento de agresión, una prevalencia alta con la coacción psicológica en primer término, seguida de la física y al final la sexual.

En la Endireh se preguntó a hombres y mujeres para determinar la magnitud de la agresión que se ejerce hacia ellas.El 66% de las mujeres de 25 a 34 años vivió situaciones de violencia emocional, física, económica, sexual, incluso discriminación a lo largo de su vida. En lo que corresponde a la violencia de pareja se registró que, en su última relación, cuatro de cada 10 la experimentaron.