REVOLUCIONAR LA PLANIFICACIÓN Y LA MOVILIDAD URBANA

REVOLUCIONAR LA PLANIFICACIÓN Y LA MOVILIDAD URBANA

3 octubre, 2021 0 Por Rene Davila

Foto: UNAM. Las ciudades enfrentan el reto de reducir emisiones de CO2 para mejorar el hábitat.

Fuente: UNAM

En la actualidad, más de 500 millones de residentes urbanos enfrentan problemas por el aumento del nivel del mar y tormentas más frecuentes o severas, y a mediados del siglo más de tres mil 300 millones de personas podrían estar en riesgo de sufrir impactos climáticos severos, según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Alejandra Alvarado Zink, especialista en medio ambiente de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la UNAM, destaca que más de 55% de la población en el mundo vive en ciudades que emiten más de 70% de los gases de efecto invernadero globales, por lo que es necesario reflexionar cómo se pueden mejorar o perfeccionar estos lugares. Con el confinamiento, la producción de residuos aumentó de manera significativa en México: la basura doméstica de 3.5 a 17%; en tanto que los desechos tipo biológico-infecciosos lo hicieron hasta en 300%.

La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales reportó en 2020, que 10% de los municipios en México no presta servicio público de acopio de basura, por lo que 16% de los residuos no son recolectados. La mayor parte de los sitios de disposición final corresponde a tiraderos o basureros a cielo abierto, y solo 3.7% de los mil sitios que hay, cumplen la NOM-083.

Por otra parte, de los siete mil 800 millones de habitantes del planeta se calcula que dos mil 200 millones carecen de acceso al agua potable, y dos mil 500 millones al saneamiento; es decir, un tercio de la población. En nuestro país, datos del reporte Numeragua, 2018, de la Comisión Nacional del Agua, indican que 39% de los usos nacionales (excepto hidroelectricidad) son suministrados por aguas subterráneas. En la zona metropolitana de la Ciudad de México se extraen mil millones de metros cúbicos cada año, y la recarga natural estimada es de 500 millones. Debido a la pandemia se incrementó la demanda de 20 a 50%; además, los operadores debieron tomar previsiones para que el recurso no se convirtiera en factor de transmisión de la COVID-19.

La maestra en Ciencias por la Universidad de Nuevo México, Alejandra Alvarado Zink, precisa que en Biología, el hábitat es considerado el área donde un organismo vive, realiza sus actividades y lleva a cabo su vida. Y lo que se quiere es revalorar el sitio donde estamos, en el caso del ser humano son múltiples los ecosistemas en los que se ha desarrollado, pero especialmente prosperó en bosques templados o cerca de cuerpos de agua.

En 1985 Naciones Unidas determinó el primer lunes de octubre de cada año, como Día Mundial del Hábitat, y la primera ocasión en que se celebró tuvo el objetivo de reflexionar sobre el derecho a la vivienda; este año el organismo internacional invita a pensar sobre “Acelerar la acción urbana para un mundo libre de carbono”.

“La ONU quiere crear conciencia de que las ciudades deben ser mejor planeadas, porque la población sigue creciendo, y se requieren cada vez más espacios donde viva la gente. Muchas personas que viven en otros lugares empiezan a emigrar a las ciudades con la esperanza de encontrar una mejor vida, y resulta que no es así”.

Con motivo de la conmemoración, que se celebrará mañana 4 de octubre, expresa que la forma en que diseñamos la generación de energía, el transporte y la construcción, así como las propias urbes, será decisiva para encaminar a las naciones hacia la consecución del Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030.