UN MAR DE CULTURA

Acuario y Centro de Conservación Michin.

El pasado miércoles 22, abrió sus puertas el Acuario Michin, Ciudad de México en el Parque Tepeyac, proyecto de conservación animal y educación ambiental.

Proyecto ambiental, de educación y esparcimiento, más importante de Latinoamericana, en la alcaldía Gustavo A. Madero, con 30 mil metros de construcción; se puede contemplar y maravillarse con diez mil ejemplares de más de 350 especies, muchas de ellas bajo programas de rescate -como el ajolote – (anfibio mexicano que conserva su aleta dorsal y sus branquias plumosas, y puede regenerar extremidades perdidas) –, conservación y liberación.

Podrás conocer todo sobre tiburones, pirañas, rayas de agua dulce, ajolotes, peces de arrecife, tortugas, medusas y muchas otras especies acuáticas. También una gran variedad de especies terrestres como la anaconda amarilla y la serpiente reticulada.

Con siete pabellones acompañados de culturas como: la Zapoteca, Maya, Olmeca, Mixteca, entre otras, acompañadas de mar abierto, selva, Arrecife, ríos y lagos, en estrecha relación con los animales y pueblos originarios.

Michin cuenta con programas de conservación de especies, un centro de investigación de fauna de los ecosistemas marinos, y un laboratorio para el cuidado del agua dulce y salada. El último piso está dedicado al esparcimiento familiar, niños de un año hasta adultos mayores con diverso entretenimiento, desde jugar golfito y escalar puentes colgantes y muros, hasta pista de patinaje, entre otros.

Su misión es generar consciencia sobre el vital equilibrio que desempeñan todas las especies en nuestro planeta, desde las más grandes hasta las más pequeñas. Como la abeja melipona que es endémica de nuestro país, y que se utilizó en tiempos prehistóricos con fines curativos, ya que se alimenta exclusivamente de flores medicinales.

Su miel es muy cotizada, entre otros beneficios, lo que ha provocado que esté en grave peligro de extinción; por lo que el acuario tiene un importante programa de conservación para evitar su desaparición, así como los pingüinos de Humboldt.

Uno de los espacios especiales, es el pabellón de la cultura invitada, se trata de la nación peruana y sus pingüinos de Humboldt. Están en serio riesgo de extinguirse. Estas aves no voladoras están incluidas en el programa de conservación binacional, en el cual se trabaja para lograr su reproducción bajo cuidado experto.

Todos los hábitats en donde viven los animales de Michin, están diseñados por expertos veterinarios, etólogos y biólogos marinos, entre otros, con conocimientos científicos, determinan el espacio adecuado y número de ejemplares que pueden estar y convivir en cada uno, para garantizar su bienestar.