APRUEBAN TERAPIA COMBINADA PARA REDUCIR ATAQUES CARDIACOS, EVENTOS VASCULARES CEREBRALES Y AMPUTACIONES

APRUEBAN TERAPIA COMBINADA PARA REDUCIR ATAQUES CARDIACOS, EVENTOS VASCULARES CEREBRALES Y AMPUTACIONES

5 marzo, 2019 0 Por Rene Davila
Se aprueba en México un anticoagulante oral para reducir complicaciones arteriales, en el corazón y extremidades.

Los pacientes con EAP tienen mayor riesgo de padecer EAC y otras enfermedades vasculares.

La terapia de rivaroxabán con ácido acetil salicílico redujo la combinación de evento vascular cerebral, muerte por causa cardiovascular e infarto de miocardio en 24%.

Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte prematura a nivel mundial, al ser responsable de que cada cuatro segundos ocurra un ataque cardíaco (infarto de miocardio) y cada cinco segundos un evento vascular cerebral (EVC), además de ser la principal causa de amputaciones. Actualmente un tercio de las muertes en el mundo se atribuyen a las enfermedades cardiovasculares, lo que representa más del doble de muertes ocurridas por cáncer. Es por ello que, para ganar la lucha en contra de estas enfermedades, la COFEPRIS aprobó en México, un régimen de terapia combinada de rivaroxabán (Xarelto®) en conjunto con Aspirina Protect® (ácido acetilsalicílico) para la prevención de eventos tromboembólicos en adultos con Enfermedad Arterial Coronaria (EAC) y Enfermedad Arterial Periférica (EAP) con riesgo elevado de sufrir eventos cardiovasculares mayores como infarto de miocardio y evento vascular cerebral.

Este nuevo esquema terapéutico basado en los datos del estudio de fase III COMPASS, logró reducir el riesgo combinado de evento vascular cerebral (EVC), muerte cardiovascular e infarto de miocardio (ataque cardíaco) en un 24% en pacientes con Enfermedad Arterial Coronaria (EAC) o Enfermedad Arterial Periférica (EAP) en comparación con la administración de 100 mg de ácido acetilsalicílico (AAS) una vez al día en monoterapia, destacó en conferencia de prensa, la doctora Alejandra Meaney, cardióloga y Medical Affairs Operation Manager de la División Pharmaceuticals de Bayer de México. Las enfermedades cardiovasculares son un grupo de trastornos del corazón y de los vasos sanguíneos, entre las que destacan la EAC y la EAP, cuyo origen es la aterosclerosis, caracterizada por la acumulación de placa (depósitos de grasa) dentro de las arterias que provocan que se estrechen y endurezcan, limitando el flujo de sangre al corazón, cerebro o extremidades, ocasionado problemas graves como infartos al corazón (miocardio) o cerebrales (EVC), así como isquemia aguda de las extremidades, con riesgo de amputación.

De acuerdo con el doctor Javier Antezana, cardiólogo clínico e intervencionista, adscrito a la Unidad Coronaria del Hospital de Cardiología del CMN Siglo XXI del IMSS, la EAC es el tipo más frecuente de enfermedad del corazón. Sin embargo, conforme empeora la acumulación de placa en las arterias, aparecen síntomas como dolor opresivo en el centro del pecho que se extiende al brazo, espalda o cuello, dando lugar a una EAC crónica con angina estable, que se manifiesta cuando el corazón demanda más sangre de la que recibe, por ejemplo, durante la actividad física o en momentos de estrés. “Si la acumulación de la placa de grasa es extensa, puede dar lugar a una angina inestable hasta bloquear por completo el flujo sanguíneo, provocando un ataque cardíaco inminente y probablemente mortal, o un evento vascular cerebral, con riesgo de secuelas importantes y riesgo de muerte”.

El doctor Gerardo Peón Peralta, médico angiólogo y cirujano vascular de la Clínica Mérida, agregó que la EAP afecta a más de 202 millones de personas en el mundo. En la EAP las placas de grasa estrechan y endurecen las paredes de las arteriales periféricas, responsables de irrigar las extremidades (piernas), manifestando dolor, calambres, debilidad o entumecimiento de las piernas, llagas en los pies o cambio de color de la piel. Entre las principales complicaciones de la EAP, destaca la isquemia aguda donde hay una disminución repentina del riego sanguíneo en la extremidad. Pero si llega a evolucionar a isquemia crítica, un riego sanguíneo muy disminuido, el resultado puede ser la muerte del tejido o la amputación. También se ha observado que los pacientes con EAP tienen un riesgo de amputación 20% mayor al cabo de 1 año. Hasta hoy, el tratamiento de la EAC y EAP se basaba en un estilo de vida saludable (alimentación sana, ejercicio, abandono del tabaco, reducir el estrés y evitar la obesidad), y un adecuado control de enfermedades asociadas como hipercolesterolemia, hipertensión arterial y diabetes mellitus tipo 2, aunado a procedimientos quirúrgicos como cirugías de angioplastia o de derivación (by pass) para ambos casos, o de revascularización para EAP.