BENEFICIOS DEL AULA INVERTIDA

BENEFICIOS DEL AULA INVERTIDA

7 octubre, 2020 0 Por Rene Davila

Foto: Internet. Educación más dinámica y motivante.

Fuente: Ibero

En estos tiempos de confinamiento por la pandemia del coronavirus, diversos docentes han recurrido, para impartir sus clases, al ‘aula invertida’, metodología pedagógica que hace más dinámico y motivante el proceso de enseñanza-aprendizaje, y que empodera a las y los estudiantes al darse cuenta que tienen un liderazgo potencial en su propia formación, destacó Emilio Mario Coral García, académico de la Universidad Iberoamericana (Ibero) Ciudad de México.

En el aula invertida cada alumna o alumno asimila contenidos de manera independiente fuera del salón de clases, y los termina por conocer a fondo en el aula, en vez de que él o la docente lleguen a impartir un tema, desde el inicio, por medio de una exposición magistral.

Ello conlleva que de manera anticipada el profesorado genere un diseño pedagógico en el cual proporciona a las y los estudiantes un conjunto de materiales digitales o impresos, para que los revisen antes de la impartición de la materia, y una vez en clase lleguen a ésta con un avance en el proceso de asimilación de información y de conocimientos, para luego poder hacer una integración más profunda de éstos.

De esta manera, el trabajo de los docentes con su alumnado es más del tipo de asesoría y acompañamiento, incluso más personalizado, para profundizar en los temas. Para estimular al estudiantado a hacer ese trabajo previo, las y los maestros asignan actividades de aprendizaje previas a la clase, tales como ver videos o películas, revisar de manera crítica-analítica algún texto, hacer una WebQuest o alguna investigación rápida y breve por Internet.

Una ventaja más del aula invertida, es que pueden diversificar sus áreas de interés, que van a explorar a partir de los materiales que los docentes les proporcionan para trabajar fuera de clase. Esto implica para las/los maestros el reto de que, posteriormente en clase, deberán abordar sus temas de manera más creativa, interactiva y diversa, para motivar al alumnado a continuar apropiándose de su proceso de enseñanza-aprendizaje, y hacer una integración plena de éste.

El aula invertida requiere, de parte de las y los profesores, mucho seguimiento al alumnado. No es que los docentes suelten contenidos y dejen a los estudiantes por su lado; al contrario, se fortalece un proceso de acompañamiento pedagógico y de seguimiento más personalizado.

Respecto a si, cuando se pueda regresar a las clases presenciales los maestros y maestras seguirán utilizando parte de las metodologías del aula invertida, en esta coyuntura se ha percibido la necesidad de cambiar el paradigma de la enseñanza-aprendizaje. En este sentido que las y los docentes que han estado participando en estos procesos de transición hacia el aula virtual, hacia los modelos híbridos y a distancia, al regresar al aula presencial, se habrán diversificado y tendrán perspectivas mucho más abiertas en cuanto a las posibilidades del trabajo en el aula.

Sobre el tema de las ‘Posibilidades y retos del aula invertida’ habló a integrantes del claustro de la universidad, como parte de las charlas ‘Café en compañía’, organizadas por la Dirección de Desarrollo y Acompañamiento Educativo de la universidad.

“El gran reto es cómo estar continuamente fortaleciendo y mejorando la interacción con los estudiantes, cómo tener un verdadero diálogo a pesar de la distancia, donde los estudiantes se sientan acompañados, que sientan que tienen comunicación con sus docentes y que hay un trabajo pedagógico integral”.