EDUCAR ES TRANSFORMAR EL MUNDO
2 octubre, 2018Hacer de ellos y ellas más críticos y más innovadores.
Fuente: Ibero
La educación es formar estudiantes que sean capaces de transformar el mundo, y eso que significa que en los docentes, como intelectuales críticos que son, debe haber la actitud de replantearse lo que enseñan y cómo lo enseñan, para hacer las cosas mejor y asumir el compromiso de trabajar por la justicia, consideró el doctor Javier Murillo Torrecillas, académico de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM).
Al dictar en la Universidad Iberoamericana (Ibero) la conferencia ‘La justicia social como marco para abordar la evaluación docente’, agregó, además, que sean docentes críticos, que se planteen el porqué de las cosas y cómo se puede hacer para que sean diferentes. Cómo la labor docente se enmarca en un horario escolar –que los centros escolares pueden ampliar para colaborar con la comunidad-, en éste hay que hacer que los alumnos aprendan más y mejor; “pero sobre todo que se conviertan en agentes de cambio social”, al hacer de ellos y ellas más críticos y más innovadores.
La evaluación marca y define el comportamiento de los docentes. “Si nosotros buscamos una educación que no solamente se quede en la formación de los alumnos individuales, sino que contribuya a un mundo mejor, pues también la evaluación tiene que evaluar ese elemento, si no sería una incoherencia. La evaluación debe medir la finalidad de la educación”. “Y cómo hacerlo; pues en dos sentidos. En primer lugar, que sea justa; no tiene sentido una evaluación para la justicia social que sea intrínsecamente injusta. Y en segundo lugar, que incida en aquellos elementos que sabemos que trabajan por la justicia social, que incorpore ver cómo los profesores están trabajando en esos elementos que consideramos esenciales, no porque queramos saber cómo están, sino porque queremos ayudarles a que lo hagan mejor. Y la función de la evaluación es mejorar, ayudar al profesor a mejorar su trabajo”.
Murillo, coordinador de la Red de Investigación sobre Liderazgo y Mejora de la Educación (RILME), subrayó que la evaluación docente ayuda a mejorar el trabajo de la institución académica. “Si la universidad tiene como misión contribuir a tener una sociedad más justa, la evaluación tiene que mirar si lo está consiguiendo y ayudar a conseguirlo mejor. De otra manera no está ayudando a conseguir ese objetivo, sino quizá incluso sería contradictorio. Es pura coherencia, yo evalúo lo que es la finalidad, la misión que tengo”.
Sobre la justicia social, dijo que todas las personas, por ser personas, tienen un compromiso y responsabilidad con ésta, porque “las injusticias se dan, se mantienen, se desarrollan, en gran medida por nuestra inacción o por nuestra pasividad, o por no hacer cosas que podemos hacer, aunque sean pequeñas. La responsabilidad de la injusticia es de todas y cada una de las personas”; independientemente de sus profesiones y trabajos, y de si el gobierno cumple o no con su responsabilidad.
Boaventura de Sousa, investigador portugués famoso por el desarrollo de sus epistemologías del sur, habla de tres grandes causas de las injusticias. “Habla del colonialismo, que se da no sólo tradicionalmente, sino que se da ahora de las ciudades hacia los polos; habla del patriarcado, de este poder de los hombres frente a las mujeres; y habla del capitalismo, porque nos lleva a una sociedad donde los valores son conseguir dinero y donde se dan unas desigualdades tan brutales que hay que luchar. El patriarcado, el colonialismo y el capitalismo son los tres elementos que este autor incide, y yo estoy de acuerdo con él”.