INNOVAR Y REINVENTARNOS, LAS UNIVERSIDADES

INNOVAR Y REINVENTARNOS, LAS UNIVERSIDADES

21 mayo, 2018 0 Por Rene Davila
Intercambios, redes de investigación, reconocimiento de títulos y grados.

IV Encuentro Internacional de Rectores Universia 2018.

“Debemos formar estudiantes para trascender en la sociedad, con una mirada crítica hacia la inequidad e intolerancia, y con la aspiración permanente a un mundo sostenible y humano”. 

Fuente: UNAM

La educación de hoy demanda hacer uso creativo de la tecnología, modernizar y flexibilizar el currículo, brindar a los estudiantes las herramientas para desarrollarse y adaptarse a entornos cambiantes; hacerlos innovadores, ciudadanos íntegros, críticos y comprometidos con el mundo, afirmó el rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers, en el IV Encuentro Internacional de Rectores Universia 2018.

Hay que hacerlo, afrontando la “cuarta revolución industrial”, que se avecina con los cambios tecnológicos e informáticos de la ciencia de los grandes datos, de la inteligencia artificial, la robótica, la nanotecnología, las nuevas energías, y modelos económicos y laborales. “Sólo así habremos cumplido con la misión de innovar lo que los tiempos y nuestra sociedad nos imponen, y sobreviviremos ocho siglos más”, expuso en la Universidad de Salamanca.

En el marco del encuentro, en donde participan rectores y representantes de 600 instituciones de educación superior de Iberoamérica y celebran también el octavo centenario de su fundación, al participar en la sesión “La innovación y la internacionalización en la formación universitaria: ¿Exigencia de la oferta académica, del currículum y de los programas de estudio?”, expuso que las universidades deben innovar y reinventarse, impulsar la internacionalización de la educación superior, potencializar los intercambios, las redes de investigación, el reconocimiento mutuo de títulos, grados y la creación de dobles titulaciones.

Todo ello, enfrentando el hecho de que enseñan en el presente lo aprendido en el pasado, a quienes han de vivir en el futuro. “No es una incertidumbre menor, pues ni siquiera podemos imaginar lo que estas revoluciones de la información y de la robótica implican para generar las competencias necesarias que nuestros alumnos requerirán”. Las instituciones de educación superior no pueden limitarse a desarrollar en sus alumnos las aptitudes para desempeñar un trabajo determinado, sino que deben darles las competencias necesarias para enfrentar situaciones cambiantes, con pluralidad de herramientas y en infinidad de contextos.

“Debemos formarlos para trascender en la sociedad, con una mirada crítica hacia la inequidad e intolerancia, y con la aspiración permanente a un mundo sostenible y humano”. Asimismo, no se puede permitir que las Humanidades queden reducidas al estudio de técnicas de mercadotecnia y publicidad; o las artes sean vistas como productos de consumo de la industria del entretenimiento. Tampoco se puede aceptar que la investigación básica tenga como único fin, la transferencia de conocimientos hacia los sectores productivos o a intereses de los estados, desconectándola de la generación de conocimientos como fin genuino.