POLÍTICA SALARIAL-LABORAL DE PEÑA NIETO, DESTRUYÓ EMPLEOS DE ALTOS INGRESOS

POLÍTICA SALARIAL-LABORAL DE PEÑA NIETO, DESTRUYÓ EMPLEOS DE ALTOS INGRESOS

17 octubre, 2018 0 Por Rene Davila
Precariedad en las condiciones laborales, sin seguridad social, contratación no permanente y sin prestaciones.

El 60% de los trabajadores asalariados viven en condiciones de precariedad.

‘El sexenio del empleo precario y los bajos salarios’.

Primera de tres

Fuente: Ibero

La política salarial-laboral de la administración del presidente Enrique Peña Nieto destruyó fuentes de trabajo en empleos de altos salarios, y sólo presentó crecimiento del empleo en salarios de baja remuneración, señaló un estudio realizado por investigadores de la Universidad Iberoamericana (Ibero) Ciudad de México y de Puebla. En el análisis de coyuntura ‘El sexenio del empleo precario y los bajos salarios’, coordinado por el doctor Miguel Santiago Reyes Hernández, director del Observatorio de Salarios de la IBERO, se menciona que la política laboral y salarial es sin duda, uno de los aspectos más inamovibles de los últimos 30 años en México.

En la administración de Peña Nieto, la precariedad en las condiciones laborales, con población sin seguridad social, contratación no permanente y sin prestaciones, se vio acompañada de creación de puestos de trabajo con menores salarios y destrucción de empleos con mayores remuneraciones. Por ejemplo, la población asalariada donde hubo un mayor crecimiento del empleo, fue la integrada por trabajadores que perciben más de un y hasta dos salarios mínimos mensuales. Entre 2013 y el 2018 se crearon tres millones 189 mil 748 puestos de trabajo en esta población. Por el contrario, donde más fuentes de trabajo se perdieron, con un total de un millón 58 mil 65 empleos, fue entre quienes reciben de sueldo más de tres y hasta cinco salarios mínimos. A esto último hay que añadir que entre quienes ganan más de cinco salarios mínimos se perdieron un millón 39 mil 213 empleos.

En el sexenio de Peña Nieto se crearon empleos en mayor precariedad por condición salarial y se perdieron trabajos mejor remunerados. Del primer trimestre de 2013 al primer trimestre de 2018, se han creado cuatro millones 676 mil 314 empleos asalariados con remuneraciones entre uno y dos salarios mínimos; y se perdieron dos millones 348 mil 898 trabajos cuyos salarios oscilaban entre los dos y más de cinco salarios mínimos. Casi un millón y medio más de trabajadores respecto al inicio de la administración perciben hoy un salario mínimo y, más de tres millones de trabajadores asalariados adicionales reciben un pago por su capacidad de trabajo de uno a dos salarios mínimos, es decir, aumentó el número y proporción de trabajadores con uno y dos salarios mínimos.

Salarios por sector

La población entre un salario mínimo se concentra hoy en el sector primario, como jornalero agrícola, en comercios y restaurantes, en servicios de recolección de basura y limpieza (agrupados en los servicios sociales diversos), y en la industria manufacturera. Los trabajadores en condiciones de precariedad salarial, cuyo salario promedio es de $3,545 pesos al mes, laboran en la industria manufacturera, la construcción, el comercio, los servicios y el sector primario. ‘Agricultura, ganadería, silvicultura, caza y pesca’ es el sector con el menor salario mínimo promedio, con $2,177 pesos al mes, que recibe el 11.4% de la población con percepciones entre uno y tres salarios mínimos. En este mismo rango, entre uno y tres salarios mínimos, la mayoría de la población la conforma el 22.3%, que tiene ingresos de $3,459 pesos al mes.

Actualmente, casi dos terceras partes de la población, el 60% de los trabajadores asalariados, viven en condiciones de precariedad: no tienen seguridad social, prestaciones de ley, contratación definitiva, laboran más de 8 horas y reciben remuneraciones debajo de la línea de pobreza del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL). El 64% de los trabajadores perciben entre uno y tres salarios mínimos, situación garante de la persistencia de la pobreza en sus hogares, considerando que de acuerdo al CONEVAL, se requieren de cuatro salarios mínimos para que un hogar promedio de cuatro personas no caiga debajo de la línea de pobreza monetaria (Informe 2018 del Observatorio de Salarios).