INFORME MUNDIAL DE DROGAS 2019

INFORME MUNDIAL DE DROGAS 2019

17 julio, 2019 0 Por Rene Davila
Los estimulantes de tipo anfetamínico desplazaron a la cannabis.

En México más de 109 mil personas se inyectan drogas.

En 2018, 5.8% de esa población que se inyecta drogas, vivía con VIH.

Fuente: SS

Al presentar el Informe Mundial de Drogas 2019, que elaboró la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito en México (UNODC por sus siglas en inglés), Antonino De Leo, representante de dicha oficina, dijo que cerca de 271 millones de personas en el mundo usaron drogas en el último año, que representa 5.5% de la población de 15 a 64 años, y 31 millones presentaron algún trastorno relacionado con el uso de sustancias, cifra que equivale a 11% de los usuarios de drogas. Asimismo, 34.2 millones de personas de 15 a 64 años usaron estimulantes de tipo anfetamínico; 18.2 millones en el mismo rango de edad usaron cocaína, y 34.3 millones usaron opioides.

Destacó la necesidad de estrechar la cooperación internacional y concertar apoyos sobre los desafíos que plantean las drogas en todo el mundo, impedir poner en peligro los esfuerzos para lograr las metas de la Agenda 20-30, consistentes en garantizar una vida sana, promover la paz y la justicia. En materia política, es necesario fortalecer los compromisos y aumentar los recursos para ampliar la prevención del consumo de drogas, robustecer el tratamiento para los trastornos por consumo de estas sustancias, basado en datos científicos que estén integrados dentro del sistema de salud de cada país.

Este año el Informe Mundial señala la necesidad de vigilar los mercados de cannabis, ya que las consecuencias negativas para la salud de una iniciación temprana en el consumo con fines no médicos, deben comprenderse mejor, principalmente por parte de la juventud, a través de estrategias de prevención. La población que está privada de su libertad es vulnerable a los daños que causan el consumo de drogas, y aproximadamente una de cada tres personas encarceladas en todo el mundo ha consumido estas sustancias, al menos una vez durante su estancia en prisión. Además, durante 2017, hubo en promedio 10.7 millones de personas detenidas en todo el mundo, tanto en prisión preventiva como cumpliendo una pena, y la prevalencia de trastornos por consumo de drogas es mayor en las mujeres privadas de su libertad que en los hombres. 

La directora general de Atención y Tratamiento de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), Nora Frías Melgoza, al presentar el Informe sobre la Situación del Consumo de Drogas en México y su Atención Integral 2019, dijo que en 2018 los estimulantes de tipo anfetamínico desplazaron a la cannabis al segundo puesto; el alcohol sigue siendo la droga por la que más se solicita atención en urgencias y hospitales del sistema de salud; 3.1 por ciento de las atenciones de urgencias y 4.7 por ciento de los egresos hospitalarios fueron por uso de la marihuana; en México más de 109 mil personas se inyectan drogas y de acuerdo con el Centro Nacional de Prevención y Control del VIH/Sida (Censida) en 2018, 5.8 por ciento, de esa población vivía con VIH.

El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, afirmó que el Gobierno de México ha decidido clara y contundentemente cambiar el paradigma de atención y prevención del problema de las adicciones, al pasar de un enfoque prohibicionista, a uno basado en los derechos humanos, la salud, la integración de las familias y la población en su conjunto. Indicó que esta medida es resultado de una reflexión estructurada y profunda, con la contribución de expertos, de la sociedad y un reclamo general por un cambio en el enfoque que se han plasmado en la Estrategia Nacional de Prevención de Adicciones, que se presentó en días recientes.

Esta estrategia, se enfoca en la prevención y protección de menores, adolescentes y jóvenes, para evitar que entren en el mundo de las drogas, así como en la atención a quienes están inmersos en esta problemática, ya que, las adicciones también generan problemas mentales como depresión o ansiedad, por lo que la Secretaría de Salud (SS) conforma un modelo integral de atención a la salud mental y a las adicciones, porque “no se puede permitir seguir caminando de manera aislada o fragmentada”.